Ayer, decidimos salir a dar una vuelta a la playa. Llegamos
aproximadamente a las 2:30 por lo que decidimos sentarnos en la terraza
de un restaurante a comer antes de nada. En un momento de concentración
en saborear la comida, se rompió el silencio, llego el murmullo de
muchas personas, pero tampoco eso nos desconcentró mucho, hasta que
pasado dos o tres minutos, vemos que en esa calle peatonal y dirección a
donde estábamos sentado, venia una ambulancia con las alarmas puestas y
cuando la vemos parar, lo hace justo en la terraza del restaurante que
se encontraba colindante al que estábamos nosotros. Como en ese momento
acabamos de pagar la cuenta, nos acercamos, ademas, estaba justo en
nuestro paso para irnos y nos encontramos un varón de aproximadamente
53, 55 años de edad tendido en el suelo y un técnico de ambulancia con
un chico y una chica joven de protección civil, estaban presionándole
rápidamente y con fuerza el pecho mientras de vez en cuando, le daban
con las planchas de un desfibrilador, que lo hacía mover todo su cuerpo,
todo esto, junto a un medico que se encontraba de vacaciones en el
mismo restaurante y que guiaba a estos chicos. No me quedaba otra que
pedir, orar, mirar y oír como decían, vuelve su pulso, volvemos a
perderlo, vuelve a recuperarlo y así durante aproximadamente 30 minutos
hasta que llegó un helicóptero del 061, pero cuando bajaron los médicos,
solo pudieron confirmar su muerte por parada cardio respiratoria,
taparlo con sabanas y dejarlo en aquella posición hasta que llegase un
juez forense supongo. Su familia, esposa, hijo y otros familiares que se
encontraban junto a el, observaban todo como si de un espejismo se
tratase, daban la impresión de que se encontraban en otro plano
ilusorio. Por mi parte, poco pude hacer mas que pedir a Amitabha y a
otras deidades para que lo guiasen lo mejor posible.
Ahí estaba,
la muerte a un paso de mi y mirando a su familia unos minutos antes
riendo y disfrutando, nadie llego para decirle, dentro de un instante
vas a morir, o a su familia, dentro de un instante lo perderéis para
siempre.
Quiero rendir homenaje a ese ser y familia totalmente
desconocidos para mi y que durante unos minutos de mi vida, fueron mis
maestros, me enseñaron a ver como todos somos un solo ser, es decir, en
ese momento, murió parte de mi, me demostró que la muerte no tiene nada
que ver con edad, religión, cultura, raza, sexo ni especie, esta llega
cuando un cuerpo deja de funcionar y no hay mas que ver como sale la
energía del cuerpo para seguir su camino, cada instante que pasaba, su
energía se iba haciendo menos visible hasta desaparecer de mi capacidad
de percepción Pregunte desde mi mente, donde se encontraba, y la
respuesta que obtuve en ese momento, fue:
-Observa los vasos de
agua que hay sobre la mesa del restaurante junto al cuerpo sin vida, son
tres ¿verdad? ¿puedes distinguir los vasos y el agua? A lo que me
contesté, si, puedo distinguirlos. Cada uno de los vasos, contiene su
agua, por lo que puedo distinguir tanto los vasos como el agua de cada
uno y ahí partió otra pregunta, ¿ves la jarra medio llena que hay junto a
los vasos? - si la veo - y la respuesta que me llegó fue, “cierra los
ojos e imagina que echas el agua de los tres vasos en la jarra junto con
la que esta ya contiene, ¿me podrías decir donde esta el agua de los
tres vasos? -Si en la jarra- ¿podrías identificar en la jarra cual es el
agua de cada vaso? No, ahora solo veo una jarra llena de agua sin
identificarla en partes y tres vasos vacíos. La verdad, no puedo saber
donde empieza dentro de la jarra el agua de un vaso ni donde termina.
Pues ya lo tienes claro: El vaso es el cuerpo que contenía al ser. El
agua del vaso, es el ser que estaba dentro del cuerpo, su energía. La
jarra es el universo, el cosmos donde se encuentran las energías que no
tienen cuerpo. Has dejado de ver su energía o su ser, cuando esta a
entrado a formar parte de la energía que contiene el universo y al igual
que el agua, no podrás distinguir donde comienza, ni donde termina la
de este hombre, pero no te preocupes, si el (Karma) almacén de esencias
vividas con su cuerpo, es limpio y vibra en frecuencia positiva, de
amor, compasión y paz, este almacén se trasladara dentro de las energías
del universo hasta encontrar otro cuerpo humano donde nacer y poder
seguir creciendo como ser. Su renacimiento o reencarnación, dependerá de
su karma ya que, según la frecuencia en la que vibre la energía de su
almacén del ser, renacerá en un cuerpo u otro, ten en cuenta, que no
vibra en la misma frecuencia la energía de un incesto que la de un gato y
de eso dependerá, de la vibración en la que se mueva su karma.
Sin mas que desear que tanto los que se quedan como los que se van
puedan entender la importancia de la labor en esta vida y de los actos
cometidos, me despido de este texto con mi reconocimiento hacia ese
señor y su familia que ayer, hoy y mañana, seran yo, al igual que yo
sere ellos. De quien no es mas que vuestra percepción Juan chia, que
todos esteis bien, felices y en paz...
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