¿Y CUANDO SE VAYAN LAS NUBES?

Hace unos años, decidí ir cogiendo apuntes en un cuaderno sobre algunas de las cosas que podía percibir, como actuar ante ellas como extraer el aprendizaje que llevase impreso.

Una de las cosas que me apunté en ese cuaderno, fue el observar mas a los demás, el ver como cargados de engaños y por circunstancias externas e inevitables, sufrían. Mi labor era solo la de observar y si algo estaba en mis manos para poder aliviar ese sufrir, hacerlo sin dudarlo. Esa labor me fue muy agridulce, ya que no estaba en mis manos todo lo que deseaba para ayudar. ¿Qué podía ofrecer yo….? ¿Quizás el diseño de una postal elaborada con alguna deidad, quizás escribir mis reflexiones, quizás pedir y rezar por todos los necesitados? Nada, no podía mucho más que eso.

Sois muchos los que me habéis agradecido muchos textos, sois muchos los que me habéis agradecido muchas imágenes, sois muchos los que me habéis agradecido los mantras cantados, pero yo no podía ir mas lejos. Soy uno de esos seres de los que estos año han sufrido la crisis, pero al fin y al cabo, no es eso lo que me duele, solo se trataba de hacer mas esfuerzo en el día a día. ¿Cómo me puede doler la crisis, si se han marchando criaturas que habían llegado de otros países a buscarse aquí la vida y de repente se han ido con una deuda increíble, se lo han quitado todo, yo por lo menos, a trancas y barrancas, me puedo permitir vivir el día a día entre un esfuerzo mas o menos, vivo bajo un techo y como todos los días, pero muchas criaturas no se han podido permitir eso.

La crisis a mi profesión, ha causado mucho desequilibrio y es que ¿Quién se puede permitir hoy en día comprar un disco, si hay quien no tiene ni para pan? Yo por lo menos, he comido pan todos los días, lo típico, comida hecha para varios días, pero no me ha faltado. Que pena, cuantas personas se quedan cada día sin comer. Por eso, ¿Qué puedo dar yo a nadie si no tenía nada mas que mis escrituras y mis diseños?

Pero puedo disfrutar al ver que esos cuatro garabatos y esas faltas de ortografías que he plasmado en la pantalla de tu ordenador cada cierto tiempo, me devuelve amor infinito de vosotros, es mas grande lo que recibo, que lo que doy.

He pasado varias veces por el quirófano, pero aquí sigo dando guerra. No sabéis lo que me entristece la de personas que han entrado al quirófano y su final ha sido abandonar su cuerpo, dejar esta vida, entre ellas, muchas personas conocidas.

Hoy hago balance de la vida que he dejado atrás: Momentos esplendorosos y de triunfos, recorriendo toda la geografía española y parte de otros países con mi música, acompañando a artistas de renombre, también he pasado por momentos desastrosos, esos que la mente gira y gira buscando soluciones y que mientras mas se aleja en su búsqueda, mas se aleja de la solución. ¿Y me ha servido tanto altibajo? Pues claro que si, antes me rendía ante cualquier adbersidad, mientras que hoy transporto en mi ser la sabiduría de que nada es para siempre, ni los buenos momentos, ni los malos, por lo que tengo muy claro, que toda tormenta pasa y una vez pasada, vuelve a salir el sol.

He aprendido a base de reconocer errores y he solucionado a base de esfuerzo y conocimiento. Son muchos los que me quedan por corregir todavía, pero me satisface el saber que camino hacia delante, que ya no me encuentro varado en un puerto sin saber que me depara el destino, ya que este, hoy mas que nunca está en mis manos y lo que se escapa de ellas, soy consiente de que no está en mi la solución, por lo que decido si sufriendo consigo mas que sin sufrir, mientras pasa la inevitable tormenta.

Mi mente ha ido cada día despertando un poco mas y aunque todavía mis ojos se entrecierran, se que algún día despertaré completamente, no tengo prisa, me quedan vidas por vivir.

En una ocasión, una de las como todas valiosas amistades que tengo por aquí por esta red, me comento, Juan, no pretendas ayudar al tercer mundo. Yo me pregunte, si me propongo ser un buen ser y a la vez, otro buen ser me está diciendo eso, no entiendo nada. En una de esas meditaciones que nos salen medio concentradas, ya que sabemos que todos los días no se esta lo suficientemente hábil para ello. En una de esas, me dedique a examinar el porque no podía yo hacer eso, y de repente me di cuenta que no estaba preparado, ya que todo tenia un orden: Primero, tenia que ayudar a lo mas cerca de mi y lo mas cerca que tenia era a mi mismo, “conocerme, prepararme, ir eliminando mis mayores errores, etc… Segundo, mirar alguien que esté cerca de mi que necesite ayuda. Tercero, mirar mi pueblo, cuarto, mirar mi provincia, quinto, mirar mi región, sexto, mirar mi país, séptimo, mirar mi continente, octavo, mirar mi mundo, noveno, mirar mi universo y décimo, darme cuenta que todo pertenece a mi, como yo pertenezco a todo, todo está unido, todo es una unidad. Es por eso que tengo claro, que formáis parte de mi como un servidor de vosotros, el día que deje de preocuparme una mosca, habré dejado de preocuparme de unas partículas que son extensión mía, es como si me dejase de preocupar de mi mano.

Viendo que no estoy capacitado para lograr todo lo que en mi corazón o mi ser habita, voy a seguir escribiendo, enviando diseños de postales y cantando mantras ya que es el único camino que tengo para cada día conseguir un poco mas.

Otra cosa que he aprendido en esta vida, es que me estoy haciendo clarividente de mi propio futuro, es decir, se mejor que antes lo que me va a pasar dentro de un rato y ¿sabéis porque? Es muy fácil, observa muy bien lo que haces en este momento y recibirás pistas sobre lo que te pasara luego. Por ejemplo, me pongo frente a una piscina, miro el agua, pienso en tirarme y ya de repente, adivino que cuando salga del agua voy a salir mojado. Esa es la forma mas fácil de adivinar el futuro, observar el presente.

Bueno, os dejo ya de tostón, quiero dedicar esto que he escrito, a todos los seres que lo estén o hayan pasado mal, pare que cambie su estado en la mayor brevedad para vivir bien, felices y en paz. A todos los maestros que nos han regalado su sabiduría, a todos los discípulos, y a todos los seres, desde el mas grande al mas pequeño, desde el mas oscuro al mas claro, desde el mas todo al mas nada, a la vacuidad, al infinito, a todas las religiones, a todas sus deidades, a todos sus representantes y en especial, a todo aquel, que se crea mi enemigo, ya que sin saberlo, me ha hecho su discípulo en la asignatura de paciencia.

Os desea que siempre estáis bien felices y en paz, quien no es mas que vuestra percepción, Juan Chia...